The English Patient Soundtrack - Ending Theme
-En las arenas de los tiempos quedó reflejado nuestro universo-
Querido hermano:
Has guardado en la palma de tu mano ese grano de arena que trascenderá infinito en el tiempo, en el recuerdo. Él, guarda jardines secretos, laberintos perdidos e historias eternas.
No temas mi marcha, pues ésta figurada es, únicamente eso, apariencia… Ni la muerte me alejará de mi dicha, pues alcancé la gloria, ¡hace tanto tiempo ahora!.
Como otrora, te cantaré la nana de la luna y de su hijo robado y, con todo mi amor, te contaré otra historia...
Un viejo vestido de falsa juventud, encerrado en pluma y tinta severa, me preguntó:
-¿Crees que ya nada te puede sorprender en la vida?- Contesté: - Querido reflejo del pasado, déjame enredarme en las horas, ellas hablarán a solas, y te dirán si existe respuesta a tu pregunta...
El trayecto que conduce hacia el anhelo me revelará. Disipada estaré pues, en cada crepúsculo, y acunando el nácar de los sueños cantaré otro arrullo recordando sus ojos inquietos y su pálpito desnudo. Buscaré, si es que lo hay, otro suspiro con su delirio, otro vestigio y su camino.
Ha llegado el momento: este sol de ahora luce pero no provoca, las lluvias ya no mojan la tierra, ella, ni tan siquiera devuelve aromas de remembranza. La sangre congelada en las venas de los hombres se ha vuelto costumbre, dejando falsos apretones en contratos diluidos. La supuesta voz amiga, y su compromiso, expira en los labios de una boca que cobija palabras sin intención… Vocablos perdidos.
El cielo cubierto de grises dibuja una cara airada que se disuelve, y una brisa sincera me confiesa que no hallé campos dorados, ni contadas maravillas del mundo, nada que se comparen con la belleza que irradiaron los edenes de mi vida.
P.D. Durante el temido tiempo cada rosa me hablará de él… Sostendré cada pétalo en la palma callada de nuestro corazón. Despertará y, entonces, haremos nuestro cada beso, cada mirada y su silencio.
Le pediré que pétalo a pétalo invente todo momento de nuestras vidas.
Dispuestas, las rosas, cederán sus vestiduras de seda y terciopelo como pergamino para su verso, como lazo para nuestro encuentro. Ellas que susurraron las preces de sus mañanas y de las mías, tejerán el siempre.
Quizá vuelva envuelta en seda, en verso y en alma...
Quizá sea nueva, o vieja perfecta…
Texto: Rosario Pancorbo.
El trayecto que conduce hacia el anhelo me revelará. Disipada estaré pues, en cada crepúsculo, y acunando el nácar de los sueños cantaré otro arrullo recordando sus ojos inquietos y su pálpito desnudo. Buscaré, si es que lo hay, otro suspiro con su delirio, otro vestigio y su camino.
Ha llegado el momento: este sol de ahora luce pero no provoca, las lluvias ya no mojan la tierra, ella, ni tan siquiera devuelve aromas de remembranza. La sangre congelada en las venas de los hombres se ha vuelto costumbre, dejando falsos apretones en contratos diluidos. La supuesta voz amiga, y su compromiso, expira en los labios de una boca que cobija palabras sin intención… Vocablos perdidos.
El cielo cubierto de grises dibuja una cara airada que se disuelve, y una brisa sincera me confiesa que no hallé campos dorados, ni contadas maravillas del mundo, nada que se comparen con la belleza que irradiaron los edenes de mi vida.
P.D. Durante el temido tiempo cada rosa me hablará de él… Sostendré cada pétalo en la palma callada de nuestro corazón. Despertará y, entonces, haremos nuestro cada beso, cada mirada y su silencio.
Le pediré que pétalo a pétalo invente todo momento de nuestras vidas.
Dispuestas, las rosas, cederán sus vestiduras de seda y terciopelo como pergamino para su verso, como lazo para nuestro encuentro. Ellas que susurraron las preces de sus mañanas y de las mías, tejerán el siempre.
Quizá vuelva envuelta en seda, en verso y en alma...
Quizá sea nueva, o vieja perfecta…
*Nada de lo relatado es cierto, todo es un pseudo sueño hecho de fragmentos...
Texto: Rosario Pancorbo.
